martes, 6 de diciembre de 2011

Nuevos datos del corazón de la Tierra

El ser humano sueña con viajar a otros planetas pero aún desconoce muchos de los misterios que oculta aquel que habita, como los que se esconden en su núcleo. Un equipo de científicos publica en la revista 'Nature', unos datos que ayudarán a conocer mejor ese 'corazón' inaccesible, en el que parece ser que hay mucho menos oxígeno del que se creía.

Los científicos ya sabían que la capa que rodea el núcleo está compuesta principalmente por hierro líquido y otros componentes. Uno de los que se creían relativamente abundantes es el oxígeno, dado que la Tierra lo tiene en grandes cantidades en la superficie, pero parece que no es así, según las conclusiones de Yingwei Fei y sus colegas del Carnagie Geophysical Laboratory (Estados Unidos).

Sus resultados, aseguran, ayudarán a entender mejor cómo se formó el planeta hace 4.500 millones de años, cuando polvo y materia estelar se fusionaron en los orígenes del Sistema Solar.

Los modelos actuales, además de grandes cantidades de hierro, detectaban también en torno al núcleo otros elementos como sulfuro, oxígeno, silicio, carbón o hidrógeno. En esta investigación, el equipo de Fei ha obtenido nuevos datos basándose en que cuando aumenta la profundidad dentro de la Tierra, también aumenta la presión y la temperatura.

Ello supone que los materiales actúan de forma diferente de como lo hacen en la superficie y por ello el núcleo tiene una capa líquida a su alrededor y un corazón sólido.

Aunque se conoce la profundidad del núcleo por las variaciones en la densidad y la velocidad del sonido en las observaciones sísmicas, hasta ahora era difícil medir estas características en aleaciones de hierro a determinadas presiones cuando se intentaban recrear en los laboratorios. "El problema es que no podemos tomar muestras del núcleo directamente, así que tenemos que aprender sobre el mismo con experimentos y con datos sísmicos", explica Fei.

Se sabe que impactos a gran velocidad generan ondas expansivas que aumentan la temperatura y la presión de los materiales simultáneamente, llevando a la fusión a los que se encuentran en la parte externa del núcleo. El equipo hizo experimentos simulando ondas de choque con mezclas de hierro, sulfuro y oxígeno con sacudidas eléctricas que los llevaron a estado líquido. Luego midieron su densidad y velocidad a la que viajaba el sonido a través de ellos en condiciones como las que hay en el centro de la Tierra.

Tras comparar sus datos con las observaciones previas, concluyen que no puede haber mucho oxígeno en torno al núcleo terrestre. "La investigación nos ha revelado otra forma de descifrar la identidad de los elementos ligueros que hay en el núcleo", ha señalado Fei.

Rosa M. Tristán | ELMUNDO.es